Los colores de Augusto

Foto: Rafael López Monne

Fuente: NATIONAL GEOGRAPHIC

Buscar la policromía perdida del Augusto de Prima Porta fue el reto que asumieron los restauradores Emma Zahonero y Jesús Mendiola, del taller MV Arte y Restauración. Porque, aunque en nuestro imaginario asociamos las esculturas de la Roma imperial con la ausencia de color, nada más lejos de la realidad. El color predominaba en el mundo clásico, inundaba sus edificios y sus obras de arte. Pero el paso del tiempo hizo que la policromía se desvaneciera, y las intervenciones de limpieza posteriores acabaron de despojarlas casi por completo de su decoración cromática. Esto es lo que le sucedió a la estatua de mármol que representa al emperador Augusto, cuyo original se encuentra en los Museos Vaticanos. El festival de divulgación histórica Tarraco Viva encargó a MV Arte y Restauración una réplica de la famosa escultura que el dictador Benito Mussolini regaló a la ciudad de Tarragona en el año 1934. El objetivo: investigar el oficio de policromador en la antigua Roma y proponer una nueva hipótesis sobre el aspecto original de la obra. «Partiendo de los análisis que los especialistas de los Museos Vaticanos habían realizado sobre el original, aplicamos los mismos procedimientos que se utilizaron hace 2.000 años», explica Zahonero. El resultado es excepcional. El emperador, vestido con su coraza y sus mejores galas, parece mirarnos satisfecho en el año en que se conmemora el bimilenario de su muerte.