La fuerte personalidad de Trajano y su forma de ejercer el poder se convirtieron en símbolo duradero de buen gobierno. Ya en el año 114 el Senado romano había conferido a Trajano el título de Optimus Augustus, el mejor emperador, título que ningún otro se atrevió a asumir en el futuro. En las posteriores proclamaciones de nuevos emperadores, el Senado les deseaba que superasen la felicidad de Augusto y la virtud de Trajano con una aclamación que se hizo normativa: felicior Augusto, melior Traiano. Esta valoración positiva del reinado de Trajano se mantuvo durante toda la Edad Media y el Renacimiento, llegando hasta las bases ilustradas del pensamiento político moderno. Recordemos las palabras de Montesquieu: “Nerva adoptó a Trajano, el príncipe más perfecto de quien la historia jamás haya hablado. Fue una felicidad haber nacido bajo su reinado: no hubo en absoluto ninguno ni tan dichoso ni tan glorioso para el pueblo romano”.
Sede: Museo Arqueológico de Sevilla, Plaza de América (Salón de Actos)
PROGRAMA
Día 29 Septiembre 17.00 horas
- Julián González (Catedrático Emérito Filología Clásica, Univ. Sevilla): “Datos biográficos del emperador Trajano”
- José Beltrán (Catedrático Arqueología, Universidad de Sevilla): “La Itálica de Trajano y Adriano vista desde la arqueología”
Día 30 Septiembre 10.00 horas
- Lucrezia Ungaro (Responsabile della Valorizzazione del Patrimonio Archeologico – Museo dei Fori Imperiali e Museo della Civiltà Romana): “Traiano, grande costruttore. Progetto e realizzazione dei Mercati di Traiano”
- Pilar León-Alonso (Catedrática Emérita de Arqueología, Univ. Sevilla): “Iconografía Trajanea”